El manómetro diferencial de presión Dwyer es un instrumento de medición altamente preciso, diseñado para monitorizar y medir las diferencias de presión entre dos puntos en un sistema cerrado. Además este manómetro es ideal para aplicaciones industriales y comerciales que requieren un control constante de la presión en sistemas de ventilación, calefacción, aire acondicionado, filtros, sistemas hidráulicos y otros procesos donde la presión diferencial es un parámetro crítico para el rendimiento y la seguridad. Gracias a su tecnología avanzada y su diseño robusto, el manómetro Dwyer proporciona mediciones precisas y fiables, lo que lo convierte en una herramienta esencial para el monitoreo y mantenimiento de sistemas.
| Material | Plástico moldeado Polipropileno, con marco de aluminio |
| Exactitud | ±3% FS |
| Límites de temperatura | 140°F (60°C). |
| Límites de presión | 10 psi (70 kPa). |
| Rango | 0-3″ w.c. |
| Aprobaciones de agencias | Cumple con los requisitos técnicos de la Directiva de la UE 2011/65 / UE (RoHS II). |
| Peso | 1.04 lb (472 g). |
Este manómetro diferencial está construido con materiales de alta calidad, lo que le permite resistir condiciones extremas de temperatura y humedad. Su escala calibrada ofrece lecturas claras y fáciles de interpretar, mientras que su diseño compacto y funcional permite una fácil instalación en una variedad de aplicaciones.
Además el manómetro Dwyer está equipado con una pantalla de alta visibilidad que facilita la lectura de las mediciones, asegurando que los operarios puedan monitorear en tiempo real cualquier cambio en la presión diferencial, lo que ayuda a prevenir fallos y optimizar el rendimiento del sistema.
Con una amplia gama de modelos disponibles, el manómetro diferencial de presión Dwyer se adapta a diversas necesidades industriales. Estos manómetros pueden ser utilizados para medir la presión diferencial en filtros de aire, sistemas de ventilación, compresores y otros equipos, ayudando a identificar obstrucciones o fallos en los sistemas antes de que causen daños importantes.
Su capacidad para detectar variaciones mínimas en la presión lo convierte en una herramienta indispensable para mantener la eficiencia operativa y prolongar la vida útil de los equipos.
